El ojo que la oposición tucumana tiene puesto en el escrutinio definitivo de las elecciones del domingo, que se desarrolla desde el martes en San Miguel, está puesto en el reparto de bancas de la Legislatura provincial.

Fuentes del frente opositor que encabezó José Cano calculan que perdieron con el kirchnerista Juan Manzur por entre 4 y 10 puntos, varios puntos menos de lo que arrojó el escrutinio provisorio del día de los comicios, en el que el ministro de Salud le sacó 14 puntos al diputado radical.

Es por esta razón que en la oposición prestan especial atención a la categoría de las bancas de la Legislatura tucumana, que se renuevan cada cuatro años ya que en Tucumán no hay elecciones provinciales de medio término.

Tras ganar en las cuatro ciudades más populosas de la provincia (San Miguel, Concepción, Yerba Buena y Bella Vista), la oposición calcula que en una Legislatura relativamente equilibrada podrá condicionar a Manzur como nunca pudieron hacer con José Alperovich y de esta manera pelear la gobernación en 2019 con mayor potencia.

En las elecciones de 2007, cuando Alperovich fue reelecto con 78 puntos y el candidato de la UCR sacó 2,26, el kirchnerismo se valió de la "ley de Acoples" y presentó 13 listas que se quedaron con 48 de las 49 bancas de la Legislatura provincial. La única banca de la oposición la ocupó el radical José Cano.

En 2011, la oposición tuvo un papel más decoroso que le alcanzó para ganar 7 bancas: 4 para la UCR, y una para el PRO, una para la Democracia Cristiana y una para Fuerza Republicana, el partido de los Bussi.

Sin embargo, Alperovich no tuvo inconvenientes para aprobar sus leyes puesto que desde hace años controla el parlamento con una mayoría abrumadora de 42 a 7, es decir que el oficialismo tiene los seis séptimos del cuerpo legislativo.

La Legislatura, ubicada frente al Casino de Tucumán, sólo sesiona cuando al Ejecutivo se le ocurre. “Es la escribanía de Alperovich”, resumió a LPO un ex legislador de la oposición.

Nuevo escenario

Con los resultados del domingo, en la oposición tucumana calcularon que obtendrían hasta 20 de las 49 bancas, lo que dejaría al próximo gobernador sin los dos tercios de la Legislatura.

Desde el frente “Acuerdo del Bicentenario” dijeron a LPO que esta vez, la ley de Acoples le pudo jugar en contra al oficialismo en algunas regiones, puesto que la multiplicidad de listas que presentó el kirchnerismo hizo que alguna de ellas no superara el piso para obtener una banca.

Como el sistema no es el de la ley de Lemas vigente en otras provincias, las múltiples listas le sumaron votos a Manzur pero no se acumulan entre sí para luego dividir las bancas a través del sistema D´Hont.

El mapa de las bancas tucumanas está dividido en tres: por la Capital se eligen 19 bancas, por el Oeste 18 y por el Este 12.

Alperovich tiene desde hace más de una década la hegemonía total en el Este. Con los resultados del domingo, en la oposición se esperanzan con ganar al menos 1 de las 12 bancas y aseguran que si se abren todas las urnas incluso pueden soñar con meter 2 de los 12 diputados.

En el Oeste, en tanto, la oposición sabe que perdió pero estiman que podrían colocar al menos 7 de los 18 diputados.

En tanto que en la sección Capital, que es donde Cano tuvo su mejor performance, la oposición calcula que obtendría entre 11 y 12 bancas contra 8 ó 7 del oficialismo.